Pedraza en Segovia, un pueblo con encanto

A finales de 2020, la plataforma de streaming HBO estrenó una serie muy esperada por los fans del terror y el suspense, especialmente españoles, ya que suponía el regreso del director Álex de la Iglesia a la televisión. Acostumbrada a hacer películas de estos géneros, De La Iglesia se ha convertido en uno de los más importantes realizadores europeos, gracias a filmes como La Comunidad, Las Brujas de Zugarramurdi, Perfectos Desconocidos o la inolvidable El Día de la Bestia. Con un estilo muy marcado, entre lo macarra, el humor negro y la locura ocultista, De La Iglesia parecía haber recuperado todos esos ingredientes en esta nueva aventura, a la que tituló 30 Monedas. Y desde luego, no defraudó a sus seguidores, con una serie en la que llevaba las conspiraciones ocultistas de la iglesia a un pequeño pueblo de Segovia que, curiosamente, acabó convirtiéndose en protagonista de la ficción incluso por encima de sus personajes y tramas.

Y es que lo primero que llamaba la atención a todo el que veía la serie era la belleza de aquel enclave donde se había grabado casi por completo. Un pueblo medieval con un gran castillo, una muralla imponente y una plaza donde se reunían los ciudadanos del pueblo para casi cualquier cosa importante que sucediera. De La Iglesia decidió mantener incluso el nombre real de aquel municipio en la ficción, así que todo el mundo pudo comprobar lo hermoso y especial que era Pedraza, una pequeña localidad segoviana que tiene un encanto realmente especial y que la ha convertido en el centro de atención de muchos curiosos, que deseaban conocer esta ciudad amurallada en miniatura. La llegada de 30 Monedas a una plataforma que se ve a nivel mundial ha proporcionado una gran visibilidad a Pedraza, que seguramente tenga a partir de ahora muchos más visitantes de los que solía tener hasta hace unos años.

Historia de Pedraza

El nombre de Pedraza podría venir de la palabra romana Petraria, un asentamiento conocido muy cerca del lugar donde hoy se encuentra el pueblo, una colina fortificada que permitía proteger a los señores que viviesen aquí de los ataques rivales. Las primeras reseñas sobre Pedraza nos llegan a mediados del siglo XIV, cuando pasan a manos del comendador Mayor de Montalban, quedando luego en poder de los condestables de Castilla durante varios siglos, hasta la abolición de los señoríos en el XIX. La villa se había convertido en un lugar habitual de paso de grandes personalidades como reyes, duques y nobles, y había alcanzado gran esplendor durante los siglos XVI y XVII, con la construcción de numerosos palacetes y casas señoriales, de grandes familias que vivían sobre todo de la exportación de tejido, colocando a Pedraza como una de las localidades más importantes de Europa en este sentido, comparándola incluso con Flandes.

Qué ver en Pedraza

Pedraza se encuentra en la zona este de la provincia de Segovia, muy cerca ya de la frontera con la comunidad de Madrid, ubicada en una pequeño promontorio y amurallada por completo, con el castillo en su parte más alta, como era habitual en este tipo de villas fortificadas. Lo  primero que nos vamos a encontrar al llegar es precisamente la muralla, que tiene, de hecho, un único acceso al interior de Pedraza. Se trata de la Puerta de la Villa, un pequeño túnel en forma de arco que permite la entrada a los vehículos y también a las personas que vengan a pie o a caballo desde fuera de la propia localidad. Cuenta con portones para poder cerrarse si fuera necesario. Justo al lado de la puerta se encuentra la cárcel, que funcionaba como calabozo de la torre de vigía ubicada en ese mismo lugar hace tiempo. Se restauró hace unas décadas y hoy sirve como museo histórico.

La plaza portificada de estilo castellano es también uno de los lugares más importantes de Pedraza, un sitio de reunión para sus vecinos, y con una gran relevancia en la historia de 30 Monedas, donde muchas escenas se grabaron precisamente en esa plaza, que da al restaurante y a varias casas de dos plantas, como si fuera una antigua corrala de vecinos. Muy cerca se encuentra la única iglesia de la localidad, la Iglesia de San Juan, de estilo románico pero restaurada con detalles barrocos posteriormente. Y por supuesto, la joya de la corona de Pedraza es el Castillo, construido en el siglo XIII y fortificado en el XV. Desde 1926 el castillo pertenece a la familia del pintor Ignacio Zúñiga, quien adquirió el castillo y lo remodeló para mantener su esencia. Hoy por hoy se puede acceder a una de sus torres, para conocer la obra de este pintor, ya que la familia la ha adaptado para tener allí una exposición permanente.

Noche de velas en Pedraza

Una de las fiestas más populares y especiales de Pedraza es la conocida como Noche de las Velas. Se trata de una tradición por la cual los vecinos llenan las calles y plazas de pequeñas velas, colocadas en el suelo, para que iluminen todo el pueblo con esa luz mortecina pero tan especial. De hecho, se apaga el alumbrado público y muchas ventanas se cierran para que solo quede la luz de las velas al aire libre. Es una tradición que se lleva a cabo a principios de julio, los dos primeros sábados del mes, y que congrega a muchos visitantes y curiosos por el bellísimo efecto que produce la luz de las velas en un pueblo tan especial como Pedraza, que todavía se conserva casi como si no hubiera pasado el tiempo desde el siglo, cuando vivió su época de mayor esplendor.

Hoteles y restaurantes en Pedraza

Gracias a su estilo medieval y a su singularidad, Pedraza se ha convertido en un destino turístico muy popular en la provincia de Segovia, llegando incluso excursiones desde Madrid para ver la localidad. Aprovechando este tirón, podemos encontrar varios alojamientos para turistas en Pedraza, como el Hotel de la Villa, seguramente el más cuidado, o la Hospedería de Santo Domingo, que se encuentra en una preciosa villa antigua. Hay también un par de hostales algo más económicos, pero todos con mucho encanto. Y en cuanto a los restaurantes, cualquier sitio es bueno para poder pararnos a tomar un poco de vino de la tierra, o comer lechón asado o cordero, las especialidades de la provincia. Destacan sitios como Reberte, El Soportal o Bodegón Manrique, todos ellos con décadas de experiencia en servir la mejor gastronomía segoviana.